Cultura audiovisual y Gran Canaria (y 12). Intermedia 2.0

Canariasmediafest 2010 se hacía eco de la confusión de géneros y formatos audiovisuales que, según la organización, provocaba la web 2.0. Tema reflejado desde el festival de 2004 y posteriores. La sede del certamen se desplazó a la Casa Museo de Colón.

El Festival asumió la confusión de su propuesta dando por bueno cualquier formato o género con el generoso argumento de “qué más da”. En las bases se incluyó una cláusula obligatoria de cesión de derechos para exhibir las obras en la red, entrando a concurso los cortometrajes de ficción. A pesar de ello, la participación internacional, seña de identidad del Festival, fue testimonial.

La consejera responsable de esta edición fue Luz Caballero, con la directora insular Rosa María Quintana. Se externalizó practicamente toda la producción a través de la Dirección y de una empresa de producción de eventos.

Lo mejor que puedo decir es que comenzó tarde su diseño y producción, de otra forma la dirección del cineasta Elio Quiroga, mi propuesta realizada con mucha antelación, podría haber sido un revulsivo. En la presentación se decía: “En la primera década del tercer milenio hay una ebullición en todos los aspectos de la cultura. En el arte audiovisual, los medios, los formatos, las imágenes se mezclan en un inmenso collage universal, en un mundo que se basa cada día más en la llamada «cultura de la imagen».

Y la imagen abandona su carácter fijo, en celuloide, en papel, por un proteico estado de mutación continua, de realimentación e histéresis, de palimpsesto sin final aparente, nacido de las herramientas digitales, la disposición de cámaras de bajo coste que permiten obtener imágenes en movimiento en cualquier circunstancia o espacio, de la disponibilidad de vastas colecciones de imágenes obtenidas a lo largo de los dos últimos siglos…”

Pero esas imágenes no llegaron en cantidad suficiente, puesto que el número de obras presentadas en ediciones anteriores rondaba las 400 o 500 y esta edición atrajo 132.

La propuesta de sacar el Festival a la calle dio lugar a diversas proyecciones al aire libre, por ejemplo, del film de S. Kubrick 2001, una Odisea del Espacio, en la zona aledaña a los bares de la zona de Vegueta.

Hay que destacar la proyección de la obra del cineasta Isaki Lacuesta y una selección de trabajos de Jean Rouch y otros autores; Sesiones de Cortometraje, Videodanza y Found Footage, así como las dedicadas al colectivo Moving Silence, comandado por el grancanario Luis Ortiz, y la retrospectiva del palmarés del Festival. También hay que destacar la participación de Casa África con un ciclo llamado Inter-media y la aportación al certamen del crítico Jordi Costa, corresponsable de la programación. Así como el Taller sobre el videocreador Bill Viola. Otra actividad fue el taller de la Canon 5D, dispositivo de actualidad ya que era una cámara que lograba convertir en estándar la confluencia del vídeo y la fotografía, accesible para aficionados y profesionales. Otra interesante iniciativa fue abrir un foro para comentar las obras a concurso.

De la nueva web (2010) del certamen solo diré que se redireccionó a ella la web anterior y se eliminó el acceso, referencia e información de todas las ediciones celebradas anteriormente, es decir desde 1988 hasta 2008.

Bipolar, muestra realizada por el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM) en su Sala de San Antonio Abad, también abordó la fotografía y el vídeo durante el Festival aprovechando para ello la colección del Centro. Es elocuente el texto del entonces director de este museo y centro de arte, Omar Pascual, en el folleto de presentación de Bipolar: “Muestra que debe ser observada como una veloz selección de algunos ejemplos de cómo el delirio subjetivista del individuo actual lo ha confinado a la decadencia, el vacío, la precariedad, el miedo, la autodestrucción, la sobredosis, la incomunicación o el puro silencio”. Pues eso.

Esta última edición enterró el Mediafest y la posibilidad de tener en Gran Canaria una potente bienal de arte visual y audiovisual, cuya internacionalización se había ido construyendo en ediciones anteriores.